La estética tecnológica en el paisaje


Antena de telefonía móvil
En algún lugar de la costa portuguesa entre Lisboa y Sintra, así son las antenas de telefonía móvil. Mi hermana dice que imita una araucaria, yo afirmo que a un pino.

Está claro que la estética tecnológica no ha calado aún en el mundo en el que vivimos, de igual manera que la desnuda estética fabril nunca caló entre el ciudadano de a pie cuando los arquitectos del movimiento moderno la aplicaban a viviendas y edificios públicos. Es un tema que me fascina: las vías del tren están asumidas como parte de un paisaje y no lo desvirtúan en absoluto; en cambio, las torretas de la luz y las catenarias de cables son un caso bastante más polémico, pero aún se puede encontrar gente que opina que le hacen bien estético al entorno. En cuanto a las antenas de telefonía móvil, casi todo el mundo coincide en que son feísimas.

¿Llegará el día en que las antenas de móviles, en el caso de seguir existiendo, sean tan románticamente bonitas como las vías del tren?


3 respuestas a “La estética tecnológica en el paisaje”

  1. Es una interesante opción disfrazar las torres de telefonía celular para mitigar la contaminación visual. Y creo que tu hermana tiene razón, imita a una araucaria