Software libre para los equipos viejunos


Con esta entrada inauguramos una nueva categoría en obsoletos.org: software libre. Hemos dudado en llamarla sencillamente software pero luego, pensando un poco, nos hemos dado cuenta de que poco software propietario (decimos poco para no pillarnos los dedos) interesa más que el equivalente libre para un equipo viejito. Y ¿por qué es tanto así? Bueno, de entre los cienes y cienes de decálogos que circulan por la red a favor del software libre, casi siempre bajo la figura de Linux, y en contra del propietario, representado por Windows, aquí os dejamos un par de razones que atañen a los equipos antiguos, que tienen bastante que ver con aquello de la obsolescencia planificada:

Soporte y compatibilidad a largo plazo. Este punto, más que una ventaja del software libre es una desventaja del software propietario, por lo que la elección de software libre evita este problema. Al vendedor, una vez ha alcanzado el máximo de ventas que puede realizar de un producto, no le interesa que sus clientes continúen con el. La opción es sacar un nuevo producto, producir software que emplee nuevas tecnologías solo para éste y no dar soporte para la resolución de fallos al anterior, tratando de hacerlo obsoleto por todos los medios, pese a que este pudiera cubrir perfectamente las necesidades de muchos de sus usuarios.

Veanse diferentes versiones de Windows que dejan de ser soportadas por Microsoft o software de grabación que no admite nuevos modelos de grabadoras ópticas sin una actualización, aún cuando la grabadora nueva emplee el mismo mecanismo de grabación que la antigua.
Diez ventajas del software libre y propietario, en Abadía Digital

En The Linux Information Project desarrollan un poco más la idea de la robustez del software libre ante un posible ataque de la obsolescencia planificada. Además comentan que usando software libre nadie está obligado a actualizar a una versión nueva su producto ya que cada versión sigue atendida; al no inducir la necesidad de cambiar de software el hardware sigue siendo perfectamente útil:

There is little possibility that support for Linux will be discontinued at some future date due to planned obsolescence or for any other reason. This is because the source code will always be available to anyone who wants it, including individuals who provide support for free over the Internet and businesses which provide it for a fee. In contrast, with Microsoft Windows and other proprietary software for which the source code is usually kept secret, obtaining support becomes difficult (from both a technical and a legal point of view) if the developer decides to withdraw it (for example in order to try to force users to pay for upgrades to newer versions).

There is little or no fear of major obsolescence, planned or otherwise, with Linux. This is because the UNIX architecture on which it is based has been exhaustively tested and refined for more than 35 years and has proven to be extremely efficient, robust and secure. Improvements continue at a rapid pace, but new versions remain basically compatible with the underlying UNIX architecture.

There are no forced upgrades for Linux users. This because older versions continue to be supported (e.g., with the development of new security patches and device drivers) and because newer versions, if desired, are available for free (as is all free software) and are typically highly compatible with older versions. The developers of proprietary software, however, have strong financial incentives to engage in planned obsolescence, namely, in order to induce users of earlier versions to spend money to buy or lease new versions.

25 reasons to convert to linux, en The Linux Information Project

Hay gente que propone algunas soluciones ante la falta de soporte en versiones antiguas de Windows pero en nuestra opinión no es siquiera una elección por todos los motivos que os hemos contado. De todas maneras, si usar las versiones antiguas de alguna distribución no os convence, dentro del software libre podéis encontrar distribuciones compiladas específicamente para equipos antiguos, o poco potentes como la usada en el famoso proyecto One Laptop per Child del MIT, pero perfectamente actuales.

Debido a que cualquiera que tenga el conocimiento adecuado puede saber cómo es un programa por dentro si es software libre, puede modificarlo aligerándolo hasta conseguir un software adecuado a las capacidades de cualquier equipo.

Si queréis profundizar en las diferencias de base entre el software libre y el que no lo es podéis echar un vistazo a La Catedral y el Bazar (HTML | PDF, 358kB) de Eric S. Raymond, el rey de las metáforas.

De acuerdo a estas ideas, en próximas entradas iremos comentando algunas distribuciones de Linux adecuadas para equipos viejunos.